Desde el área de Urbanismo y Obras del Ayuntamiento de Caspe se ha hecho realidad la propuesta del Proyecto de Inclusión Social de la Asociación de Ayuda al Discapacitado de Caspe y Comarca (ASADICC) de pintar de color la placeta de la calle Alcañiz.
El Proyecto de Inclusión Social es un programa dirigido a personas con discapacidad intelectual, cuyo principal objetivo es aumentar su nivel de autonomía personal, así como fomentar su participación activa en la comunidad.
Su propuesta era muy sencilla, se trataba de ofrecer un nuevo espacio lúdico en la placeta próxima a las instalaciones de la propia asociación para disfrute de usuarios del centro y del público en general.
El frío cemento de esta plaza se ha transformado en un espacio más amable, cálido e interactivo que ofrece a los usuarios la posibilidad de relacionarse y desarrollar sus capacidades a través de juegos tradicionales y dinámicos.
Pintados en el suelo, accesibles y aptos para todas las edades, juegos tradicionales como el tres en raya, calderas o rayuelas, además de la oca, el juego del espejo o mírame, entre otros, han llenado la plaza de color y han sumado una nueva área para el uso lúdico en la localidad.
