La Policía Local de Caspe durante el periodo del 13 al 19 de noviembre realizó los siguientes servicios:
Se notificó la perdida de vigencia del permiso de conducir a una persona que había perdido todos los puntos por diversas infracciones de tráfico y se comunicó, posteriormente, a la Dirección General de Tráfico.
Realizando las labores de vigilancia y control del tráfico, se detectó a un vehículo que cometía una infracción de tráfico. Tras darle el alto al conductor, los Agentes observaron que podría estar conduciendo bajo los efectos del consumo de estupefacientes y se le invitó a realizar la prueba de detección de este tipo de sustancias, arrojando un resultado positivo. Se le denunció por conducir bajo los efectos del consumo de estupefacientes.
Los agentes realizaron dos informes sobre edificios en estado ruinoso para que desde el departamento de Urbanismo se adopten las medidas correspondientes.
Intervención en un accidente que se produjo al golpear un vehículo un contenedor de obras.
Tras requerimiento de un ciudadano, se procedió a localizar a un perro que deambulaba por la ciudad. Este no portaba chip y fue trasladado por la Brigada a la perrera municipal.
La patrulla de la Policía Local procedió al control de ocupación de los puestos del mercado ambulante, sin incidencias.
En colaboración con la Guardia Civil, se procedió a realizar un punto de verificación de vehículos, dando como resultado que el conductor de uno de los vehículos controlados dio positivo en el consumo de estupefacientes, motivo por el que fue denunciado.
Se requirió a la Policía Local, debido a que un perro que estaba suelto en un camino había tirado al suelo a una persona de edad avanzada, provocándole lesiones por la caída. De inmediato se pasó aviso a los servicios sanitarios. La Policía Local atendió en el lugar a la persona afectada hasta su traslado al Centro de Salud. Acto seguido se localizó al perro y al titular del mismo que se hizo cargo del animal, así como de la responsabilidad de los daños causados a la persona lesionada.
El día 19 (domingo), mientras la patrulla de la Policía Local se encontraba realizando labores de vigilancia y control del tráfico, pudo observar a una persona que circulaba en bicicleta en sentido contrario al de la circulación por la calle Diputación con dirección a la Plaza Aragón, a gran velocidad y sin respetar el semáforo que se encontraba en fase roja. Los Agentes le ordenaron que se detuviese, y en el momento de entrevistarle, este comenzó a ponerse en un estado de gran nerviosismo.
Los Agentes percibieron un fuerte olor a acidez, por lo que le preguntaron si tenía algo que pudiera ser ilícito, observando que bajo el pantalón y entre su ropa interior portaba un recipiente hermético de cristal con una porción considerable (200 gramos) de una sustancia que, tras ser comprobada por Guardia Civil, resulto ser cocaína de gran pureza, manifestándolo así el propio implicado. Por todo ello, quedó detenido por un presunto delito contra la salud pública, paso a disposición judicial y fue trasladado al día siguiente al centro penitenciario de Zuera por orden del Juzgado de Caspe.