Una de las prioridades de este Ayuntamiento es la gestión eficiente de la energía, por un lado, para conseguir una reducción de los costes energéticos, manteniendo la calidad del servicio y, por otro, para servir de modelo y ejemplo a los ciudadanos.
Para ello, es necesario hacer un diagnóstico de la situación energética de cada edifico y aplicar las medidas que permitan optimizar el consumo con el consiguiente ahorro en el gasto final y para lograr este objetivo, se deben aplicar diversas medidas: mejoras en el aislamiento térmico, la sustitución de la iluminación por equipos de bajo consumo y la revisión y control de los contratos de suministro muchas veces obsoletos o por encima de las necesidades actuales de los edificios.
Esto último ha sido una de las actuaciones que el Ayuntamiento de Caspe, a través de su concejalía de Urbanismo, ha aplicado desde el comienzo de la legislatura y cuyos frutos se pueden valorar en la actualidad. La factura eléctrica se ha visto reducida en el último año 2021 en un 3,5% (12.450 €), a pesar de que, respecto a año 2020, en este pasado ejercicio se ha registrado un considerable aumento de los precios de la energía y, también, del consumo eléctrico que alcanza un 10,3% más que el año anterior, como consecuencia de la recuperación de la actividad en todas las instalaciones municipales.
Un importante ahorro económico que es el resultado de revisar y adecuar los contratos de suministro a las necesidades de cada instalación, además, de una manera sistemática, se están sustituyendo los sistemas de iluminación por otros de bajo consumo y se invierte en mejoras del aislamiento de los edificios municipales. En esta situación nos encontramos las instalaciones deportivas municipales que se van adaptando a este objetivo, vistas las últimas inversiones en iluminación de bajo consumo en pabellones y campo de fútbol.
Por otro lado, se tienen en cuenta las subvenciones y programas de ayuda europeos que permiten a la entidad optar a la financiación para nuevos proyectos de mejora, tales como energías renovables para aquellos edificios que precisan más consumo de energía para su mantenimiento, en este apartado se encuentra el proyecto para climatizar la Piscina Cubierta, el parque fotovoltaico para alimentar la nueva potabilizadora y por otro, el previsto para la estación de bombeo de los nuevos regadíos.
En la actualidad se encuentra ya adjudicado y en desarrollo uno de los proyectos que más se ajusta a este criterio, el cambio de luminarias en las vías públicas que permitirá reducir el consumo energético y, por consiguiente, se reducirá de forma importante la factura de este servicio y además, la ciudad se beneficiará de nuevas mejoras medioambientales que incluyen acreditarnos como destino turístico Starlight, al estar protegidos de la contaminación lumínica cuando finalice su ejecución.
También se encuentra en valoración, a través de un proyecto impulsado por la Comarca Bajo Aragón Caspe, la implantación de placas fotovoltaicas en algún edificio municipal y nuevos puntos de recarga de vehículos eléctricos. Con todo ello, se puede demostrar el esfuerzo realizado para la gestión eficiente del suministro eléctrico con unas actuaciones que se ajustan a los objetivos establecidos por la AGENDA 2030. #Soy2030