El sábado 10 de agosto se ha celebrado el acto institucional del Pregón de Fiestas en el que D. Miguel Caballú Albiac nuestro Pregonero de Fiestas de San Roque 2024, nos dedicó un pregón caracterizado por su sabiduría y buen hacer y en el que nos trasmitía optimismo y razonable esperanza.
Momentos antes del inicio del acto, el Ayuntamiento de Caspe invitó a nuestro pregonero a firmar en el Libro de Honor de la entidad, acompañado de la Corporación Municipal y de su familia. En este acto se le entregó como recuerdo, en nombre del pueblo de Caspe, un obsequio consistente en una obra “Espejeo” del artista local Ferguars (Joaquín Guallar).
Queremos, como es su deseo, que las palabras de este caspolino “Doctor amoris causa” por Caspe lleguen a todos los vecinos de Caspe. A continuación, os lo ofrecemos para su lectura y podéis descargar el díptico adjunto, aportación de la Tipográfica Sanz, con el emotivo pregón de Fiestas de San Roque y el himno de Caspe que se interpretó en el acto siempre acompañados por la Banda Municipal de Música y el Coro Ciudad de Caspe.
Las Caspolinas Mayores e Infantiles y los Caspolinos Mayores también fueron los protagonistas del acto en el que se la Corporación y la alcaldesa les impusieron las bandas que les identifican para empezar su reinado. Al finalizar, acompañados por la Banda Municipal iniciaron la verbena de San Roque con baile de honor junto a la corporación.
Este acto nos ha dejado a las puertas de nuestras Fiestas Patronales que tendrán su máxima expresión el lunes 12 de agosto a las 13:30 horas con el Chupinazo y la Tronada Inaugural de las Fiestas de San Roque 2024.
Os ofrecemos una pequeña galería de fotos con los momentos más representativos.
¡Felices Fiestas de San Roque!
Pregón Fiestas San Roque 2024- Miguel Caballú
PREGÓN FIESTAS SAN ROQUE
Amigas, amigos:
Caspolinas Mayores e Infantiles, Caspolinos Séniors, Extraordinario Coro Ciudad de Caspe y centenaria Banda de música, autoridades, invitados, visitantes, turistas, Peñas fabricantes de alegría… pueblo de Caspe.
Gracias al Excelentísimo Ayuntamiento y Comisión de Fiestas por ofrecerme esta oportunidad de celebrar la Fiesta con mis convecinos, porque… nunca me he ido de Caspe y aquí sigo empadronado… Soy desde hace 83 años un caspolino más.
Felices Fiestas. Tenéis la suerte de poder disfrutar de alegría contagiando alegría. Y os veo no solo contentos, sino felices. Ya dijo el sabio Heráclito que es importante para la felicidad de una persona haber nacido en un pueblo importante… Como Caspe, por ejemplo.
Querría transmitiros felicidad, buenas vibraciones, optimismo razonado y razonable esperanza.
Las fiestas son un hito en la vida de una persona. Quizá son momento idóneo para repasar y repensar lo bueno del año. Y es momento para coger aire y acometer todo eso que hemos ido dejando “para después de las Fiestas”, que suele ser mucho.
Con la energía acumulada en las Fiestas, es buen momento para abandonar pensamientos tóxicos y ponerse a trabajar con entusiasmo, para no tener miedo a ir lejos y poner nuestros límites más altos.
Las Fiestas pueden ser el principio de grandes decisiones sobre el ignorado Castillo del Compromiso, el desaprovechado Mar de Aragón, el amputado Guadalope, sobre el papel de una Comarca de seis pueblos con cinco ríos, o el dejar de mirar hacia otro lado con la inmigración.
Dudamos del progreso, nos falta fe en el futuro, pero el mundo es de los emprendedores, los intrépidos y de quienes miran el horizonte que es de donde llega la inspiración. Faltan autónomos, falta industria, pero siempre pasan trenes de oportunidades a los que agarrarse…incluso por la maltratada Estación y línea de Caspe.
Los caspolinos tenemos suerte… pero no siempre sabemos apreciarla. Recuerdo que hace justo 100 años se empezó el Pantano de Civan, hace 101 años que se fundó el C.D. Caspe, hace 102 que tocó el gordo de la lotería…
A pesar de estas suertes, las Fiestas no estaban para muchas músicas. Hace justo 100 años, en 1924, hubo hasta cuatro cambios de alcalde, y el panorama nacional estaba fatal… pero, aun así, los caspolinos hicieron programa oficial de Fiestas por primera vez. Quizá os haga gracia saber que aquel presupuesto municipal de Fiestas era 1.000 pesetas (6 euros). La Rondalla ganadora del Concurso de Jotas tuvo un premio de cincuenta pesetas (3o céntimos).
Se escribía y cantaba:
De Caspe son sus Patronos/
San Roque y San Sebastián/
Cuyas fiestas celebramos/
Con pobreza sin igual/
Pues más son fiestas de aldea/
Que de una gran ciudad.
Hoy, 100 años después, puedo pregonar que celebramos unas fiestas de una gran ciudad.
ESPERANZA
Desde aquí arriba, desde las” escaleretas” de la principal colina de “la Ciudad de las seis colinas”, veo a algunas personas que no ven alentador el horizonte. Y dicen ¡Ay, Caspe! Y tienen su parte de razón. Animo a los ciudadanos, sobre todo a los jóvenes, a comprometerse con los asuntos de la ciudad, a no repetir las inercias de sus mayores. No hay que resolver los problemas de hoy con prejuicios del pasado.
Veo a mi pueblo como un rico territorio, con muchos puntos fuertes, cuyos muy diversos habitantes suman calidez social a la calidad humana. También hace justo 100 años, decía nuestro paisano José María Albareda que no hay dos personas idénticas pero que “complejidad no es desorden”.
Es obligado ordenar. Es difícil llegar a la armonía, pero aun así, cuando el respeto, la educación y la paciencia, orillando lo superfluo, prima en los valores de las personas, mejora la convivencia.
Os ruego Razonable esperanza, porque siempre hay algo que esperar. Ejemplo reivindicativo: En 1912, hace 112 años, se colocó aquí mismo, en este jardín, la primera piedra del Museo del Compromiso. Tengo confianza en que no tardará en colocarse la segunda… En vuestra mano está.
Y TERMINO CON OPTIMISMO Y ESPERANZA
Las Fiestas son un buen momento para difundir nuestros valores y forma de ser, crisol de una cultura amasada lentamente a lo largo de dos milenios.
Toca identificarnos con el pasado, pero sobre todo aceptar los retos del futuro. Solo aceptando el cambio seremos mejores… Vivid el mejor presente, soñad el mejor futuro. Porque sabed que “cualquier tiempo pasado no fue mejor”.
Construyamos juntos unas fiestas inolvidables. El Caspe de hoy está cuajando la historia que se contará mañana. Estoy seguro de que la historia de estas Fiestas será otro ejemplo de solidaridad y de “buen rollo”.
Os deseo lo mejor para este querido Caspe y para vosotros, queridos convecinos y amigos. Que la alegría no os ciegue la realidad. Que las músicas festivas se sigan oyendo hasta el próximo San Roque, que los cohetes sigan despertando vuestro amor a esta milenaria Ciudad a la que merece amarse… porque sabe enamorar, comprender, acoger y corresponder. ¡Viva Caspe!
- Miguel Caballú Albiac
Sr. Pregonero de las Fiestas de San Roque
