Ayer, el Gobierno de Aragón otorgó la Medalla de Aragón al operativo de voluntarios que participaron en las labores de emergencia tras la DANA en Catarroja (Valencia). En representación de Caspe, asiste al acto la alcaldesa Ana Jarque, acompañando a empresarios, particulares y voluntarios que han demostrado una solidaridad ejemplar.
La contribución de los voluntarios caspolinos ha sido fundamental en los trabajos de limpieza, recuperación y apoyo a los afectados por las inundaciones. Este reconocimiento pone en valor su entrega, esfuerzo y compromiso con quienes más lo necesitan, reflejando el espíritu solidario de nuestra localidad.
Desde el Ayuntamiento de Caspe, se ha seguido de cerca la labor de estos efectivos, facilitando recursos y colaborando estrechamente con ellos. El jefe de la Policía Local de Caspe tuvo el honor de recibir este galardón en representación de todos los caspolinos que, con generosidad y dedicación, ofrecieron su tiempo y recursos para asistir a quienes más lo necesitaban. Durante una semana, un grupo de empresarios locales se trasladó a Catarroja para brindar apoyo incondicional, convirtiéndose en un ejemplo del compromiso y la solidaridad que caracteriza a nuestra comunidad.
Han sido más los voluntarios de Caspe que, de forma anónima y desinteresada, han trabajado intensamente desde las primeras semanas tras la DANA, bien realizando acciones individuales o con otras iniciativas como el envío de brigadas de ayuda y la organización de actividades solidarias para recaudar fondos destinados a la reconstrucción.
El Ayuntamiento de Caspe se suma al reconocimiento otorgado por el Gobierno de Aragón que se materializa con la recepción de la Medalla de Aragón por nuestro representante, destacando que quiere hacerlo extensivo a todos aquellos que se han involucrado en las labores de emergencia y ayuda humanitaria. Subrayar las palabras de Ana Jarque: “Mi más sincero agradecimiento por la solidaridad demostrada por los ciudadanos caspolinos ante la tragedia provocada por la DANA en la Comunidad Valenciana. Me siento profundamente orgullosa de nuestros empresarios, policía local, voluntarios y ciudadanos que se unieron para ayudar a nuestros hermanos en Catarroja y otras localidades. Su esfuerzo refleja los valores de empatía y cooperación que nos definen como pueblo. Juntos hemos demostrado que, en momentos difíciles, la unión y la solidaridad son fundamentales”.
Este reconocimiento no solo celebra el trabajo realizado, sino que también invita a seguir fomentando el apoyo mutuo entre comunidades. Este homenaje es un orgullo para toda la comunidad caspolina, Caspe se erige como un faro de esperanza y colaboración, recordando que siempre hay espacio para ayudar al próximo y demuestra, una vez más, su capacidad para unirse en momentos de dificultad y apoyar causas que trascienden las fronteras de nuestra localidad.
Caspe, siempre solidario y comprometido.
